lunes, 4 de abril de 2011

ecologia

  1. Explica con detalle la influencia de los parámetros astronómicos en el clima:
 
La astronomía es la ciencia que se ocupa del estudio de los astros, especialmente de las leyes que rigen su movimiento. Es, por tanto, la ciencia del Universo y estudia la estructura y evolución de las galaxias, estrellas, planetas, cometas, satélites... El nacimiento de esta ciencia tiene su origen en un puro interés material: la construcción de calendarios que rigiesen los trabajos agrícolas de siembra y recolección observando la regularidad cíclica de sucesos tales como el día y la noche o las estaciones climáticas.
En la actualidad, la astronomía comparte sus técnicas experimentales y objetos de estudio con otras áreas de la ciencia, en especial con la astrofísica, geología y climatología planetaria, la física nuclear, la electrónica y la astronáutica y sus avances tienen un impacto cada vez mayor en los medios, por la interrelación de sus conclusiones con fenómenos de alto interés público como la influencia de los parámetros de la órbita terrestre con las glaciaciones o periodos de clima especialmente cálido, la influencia de los ciclos solares en ello, o los paralelos entre la evolución del clima de Venus, fuertemente marcado por el efecto invernadero, y la propia Tierra reaccionando ante la agresión de las emisiones de CO2 desde la Era Industrial.
Algunas enfermedades como cólera, malaria, dengue y fiebre amarilla cobrarán fuerza con el calentamiento global, ya que el clima juega un papel determinante en las enfermedades causadas por vectores esta enfermedad ha surgido en diferentes épocas también se ven ahorita en la actualidad.

2. ¿QUÉ FUNCIÓN TIENEN LOS GASES DE EFECTO INVERNADERO EN LA VIDA DE NUESTRO PLANETA?

La función que tienen los gases de efecto invernadero en la vida de nuestra tierra se calienta gracias a la energía del Sol. Cuando esta energía llega a la atmósfera, una parte es reflejada de nuevo al espacio, otra pequeña parte es absorbida, y la restante llega. a la Tierra y calienta su superficie.

Pero cuando la Tierra refleja a su vez la energía hacia la atmósfera, ocurre algo diferente. En lugar de atravesarla y llegar al espacio, los gases de la atmósfera absorben una gran parte de esta energía. Esto contribuye a mantener caliente el planeta.

De esta manera, la atmósfera deja que la radiación solar la atraviese para calentar la Tierra, pero no deja salir la radiación que- la Tierra irradia hacia el espacio. En un invernadero ocurre lo mismo, salvo que en el invernadero se utiliza cristal, en vez de gases, para retener el calor. Por eso llamamos a este fenómeno efecto
Los gases invernadero de la atmósfera cumplen la función de mantener la temperatura media adecuada para la Tierra, a pesar de que las temperaturas varíen mucho de un lugar a otro. Si estos gases aumentaran, retendrían demasiado calor. Esto provocaría el recalentamiento del planeta.

El Protocolo de Kioto, es un acuerdo firmado por 150 países que entró en vigor el 16 de febrero de 2005. En el queda reflejado que los países desarrollados y los que se encuentran en vías de desarrollo o industrialización, se comprometen a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero hasta situarlas por debajo de los niveles de 1990, año de referencia, durante el período 2008-2012.
Los gases de efecto invernadero:
* dióxido de carbono (CO2)* hidrocarburos fluorados (HFCs)* metano (CH4)* hexafloruro de azufre (SF6).* perfluorocarburos






 



3. El ozono
Las moléculas de ozono y de oxígeno en la estratosfera absorben la luz ultravioleta que proviene del Sol, formando un escudo que previene que la radiación llegue hasta la superficie de la Tierra. Mientras que el oxígeno y el ozono absorben 95 a 99.9% de la radiación de luz ultravioleta del Sol, sólo el ozono absorbe la luz ultravioleta más energética, conocida como UV-C y UV-B. Esta luz ultravioleta causa daño biológico como cáncer de la piel. Esto quiere decir que el ozono es inalterable en la estratosfera, ya que es de mucha ayuda para absorber los rayos ultravioleta que nos dañan.
A continuación se hablaran de algunos gases que destruyen el ozono:
La tierra se halla rodeada, entre quince y cincuenta kilómetros de altura, de una capa de ozono estratosférico. La máxima concentración de ozono se localiza entre los 25 y 30 kilómetros de altura y es de vital importancia para la vida en la superficie. El ozono actúa como unas gigantescas gafas de sol que filtran la peligrosa luz ultravioleta.    
El ozono. O3, es un alótropo del oxígeno, O2, es decir, es el mismo elemento pero bajo otra forma. El oxígeno molecular que respiramos contiene dos átomos de oxígeno y el ozono tiene tres. Esta variación molecular modifica notablemente las propiedades químicas de estos compuestos. Así, mientras el oxígeno es indispensable para la vida, el ozono es una gas de efectos nocivos para la salud si se presenta en altas concentraciones en las capas bajas  de la atmósfera y en diferente concentraciones. En la Estratosfera, donde el ozono actúa como filtro ultravioleta y en la capa baja  de la atmósfera (Troposfera), donde su presencia se considera, en determinadas concentraciones, como contaminante.   
El ozono se forma a partir del oxígeno molecular mediante la absorción de la luz ultravioleta del sol. Esta reacción es reversible, es decir, debido a la presencia de otros componentes químicos el ozono vuelve a su estado natural, el oxígeno. Este oxígeno se convierte de nuevo en ozono, originándose un proceso continuo de formación y destrucción de estos compuestos.
El problema aparece cuando la concentración de los componentes que favorecen la transformación de ozono en oxígeno aumenta debido a la aportación de las actividades humanas.
Entre estos compuestos destacan los CFC, que significan hidrocarburos de cloro y flúor, y los galones, que son hidrocarburos que contienen bromo, que como ya se ha indicado, se usan como agentes refrigerantes, disolventes, espumas aislantes, sustancias contra incendios, etc.
Sin embargo, estos compuestos no son lo únicos dañinos para la capa de ozono. Así, otros gases como los óxidos de nitrógeno, los constituyentes del ciclo del carbono y los compuestos hidrogenados, secombinan con los derivados del cloro y del bromo para modificar el frágil equilibrio en la capa de ozono de la Estratosfera. 
Aunque el ozono posee un proceso natural de regeneración, las medidas de reducción de las emisiones de CFC a la atmósfera no se dejarán notar hasta dentro de, por lo menos, una década.
Los primeros pasos tendentes a esta reducción ya han sido dados. La firma, en octubre de 1987, del Protocolo de Montreal, que desarrolla las directrices del Convenio de Viena para el control de sustancias que agotan la capa de ozono y la Cumbre de la tierra, celebrada en Río de Janeiro en 1992, son ejemplos del interés internacional por erradicar este problema. En virtud de estos acuerdos, en el año 1994 se han suspendido la fabricación de todo tipo de galones y se han establecido planes concreto para la reducción del CFC.

Se entiende por el efecto que produce una determinada acción humana sobre el medio ambiente en sus distintos aspectos. El concepto puede extenderse, con poca utilidad, a los efectos de un fenómeno natural catastrófico. Técnicamente, es la alteración de la línea de base, debido a la acción antrópica o a eventos naturales.
Las acciones humanas, motivadas por la consecución de diversos fines, provocan efectos colaterales sobre el medio natural o social. Mientras los efectos perseguidos suelen ser positivos, al menos para quienes promueven la actuación, los efectos secundarios pueden ser positivos y, más a menudo, negativos. La evaluación de impacto ambiental(EIA) es el análisis de las consecuencias predecibles de la acción; y la Declaración de Impacto ambiental (DIA) es la comunicación previa, que las leyes ambientales exigen bajo ciertos supuestos, de las consecuencias ambientales predichas por la evaluación.
La preocupación por los efectos de las acciones humanas surgió en el marco de un movimiento, el conservacionista, en cuyo origen está la preocupación por la naturaleza silvestre, Progresivamente esta preocupación se fundió con la igualmente antigua por la salud y el bienestar humanos, afectados a menudo negativamente por el desarrollo económico y urbano; ahora nos referimos a esta dimensión como medio social


La contaminación de los mares con petróleo es un problema que hace que algunas personas se  preocupen desde hace muchos años a los países marítimos, sean o no productores de petróleo, así como a las empresas industriales vinculadas a la explotación y comercio de este producto. Desde entonces, se han tomado enormes previsiones técnicas y legales internacionales para evitar o disminuir la ocurrencia de estos problemas.
Los derrames de petróleo en los mares, ríos y lagos producen contaminación ambiental: daños a la fauna marina y aves, vegetación y aguas. Además, perjudican la pesca y las actividades recreativas de las playas. Se ha descubierto que pese a la volatilidad de los hidrocarburos, sus características de persistencia y toxicidad continúan teniendo efectos fatales debajo del agua. Pero, no son los derrames por accidentes en los tanqueros o barcos que transportan el petróleo, en alta mar o cercanía de las costas, los únicos causantes de la contaminación oceánica con hidrocarburos. La mayor proporción de la contaminación proviene del petróleo industrial y motriz, el aceite quemado que llega hasta los océanos a través de los ríos y quebradas. Se estima que en escala mundial, 3.500 millones de litros de petróleo usado entran en ríos y océanos y 5.000 millones de litros de petróleo crudo o de sus derivados son derramados. Los productos de desechos gaseosos expulsados en las refinerías ocasionan la alteración, no sólo de la atmósfera, sino también de las aguas, tierra, vegetación, aves y otros animales. Uno de los contaminantes gaseosos más nocivo es el dióxido de azufre, daña los pulmones y otras partes del sistema respiratorio. Es un irritante de los ojos y de la piel, e incluso llega a destruir el esmalte de los dientes.

Otro de los impactos que genera la explotación de los recursos energéticos es la contaminación acústica, pues el ruido producido por la industria, disminuye la capacidad auditiva y puede afectar el sistema circulatorio, y aún, cuando los trabajadores de estas industrias ya están acostumbrados al ruido por escucharlos en forma prolongada, les genera daños mentales.

Los impactos sobre ecosistemas y la salud de la población son gravísimos por los niveles letales de dióxido de carbono, azufre e hidrocarburos orgánicos volátiles, por sólo nombrar algunos. Los incendios en 500 pozos de petróleo durante la anterior guerra del Golfo lanzaron a la atmósfera 3 millones de toneladas de humo contaminante. La nube cubrió 100 millones de kilómetros cuadrados, afectando el territorio de 4 países, lo cual provocó enfermedades respiratorias a millones de personas. Los derrames mataron a más de 30.000 aves marinas, contaminaron 20% de los manglares y la actividad pesquera se arruinó.
Según el World Resources Institute, los residuos tóxicos de la guerra del Golfo afectarán a la industria pesquera local "por más de 100 años" a lo que debemos sumar los impactos de la guerra actual y a los ecosistemas agrícolas y las cuencas de los ríos Tigris y Eúfrates entre otros, de los que dependen casi todas las actividades económicas del país.
Finalmente se espera que Estados Unidos, tal como en la guerra del Golfo, vuelva a usar municiones con "uranio empobrecido" (depleted uranium-DU) en aviones, tanques, cañones antitanques y minas terrestres por su densidad y capacidad de penetración. Estas municiones explotan, arden al atravesar el blanco aumentando su poder destructivo y generan gran dispersión de óxido de uranio a la atmósfera, contaminando químicamente a los seres humanos y al ambiente. Diversos informes señalan que la contaminación química y radiactiva del uranio empobrecido en Irak es responsable del gran aumento de abortos, malformaciones genéticas, leucemia infantil y cáncer en el Sur de este país; justamente cerca de la recién bombardeada ciudad de Basora, donde en 1991 se utilizó la mayor cantidad de municiones del letal elemento.
Impactos sobre el medio social
Los impactos sobre el medio social afectan a distintas dimensiones de la existencia humana. Se pueden distinguir:
Efectos económicos. Aunque los efectos económicos de las acciones suelen ser positivos desde el punto de vista de quienes los promueven, pueden llevar aparejadas consecuencias negativas, que pueden llegar a ser predominantes sobre segmentos de población desprovistos de influencia.
Efectos socioculturales. Alteraciones de los esquemas previos de relaciones sociales y de los valores, que vuelven obsoletas las instituciones previamente existentes.

También hay efectos tecnológicos. Innovaciones económicas pueden forzar cambios técnicos. Así, por ejemplo, uno de los efectos de la expansión de la agricultura industrial es la pérdida de saberes tradicionales, tanto como de estirpes (razas y cultivares), y la dependencia respecto a “inputs” industriales y agentes de comercialización y distribución.
Efectos sobre la salud. En la Inglaterra de los siglos XVIII y XIX, la migración de la población del campo a las ciudades, activamente promovida por cambios legales, condujo a condiciones de existencia infrahumanas y expectativas de vida muy bajas. El desarrollo de normas urbanísticas y de salud laboral, así como la evolución de las relaciones de poder en un sentido menos desfavorable para los pobres, ha moderado esta situación sin resolver todos los problemas. La contaminación atmosférica, tanto la química como la acústica, siguen siendo una causa mayor de morbilidad. Un ejemplo extremo de las dimensiones que pueden alcanzar los efectos lo proporciona la contaminación del agua subterránea en Bangladesh, donde unos cien millones de personas sufren irremediablemente de intoxicación crónica y grave por arsénico, por un efecto no predicho, e impredecible, de la expansión de los regadíos.
Impactos sobre el sector productivo
La degradación del medio ambiente incide en la competitividad del sector productivo a través de varias vertientes, entre otras: (I) falta de calidad intrínseca a lo largo de la cadena de producción; (II) mayores costos derivados de la necesidad de incurrir en acciones de remediación de ambientes contaminados; y (III) efectos sobre la productividad laboral derivados de la calidad del medioambiente. También afectan la competitividad la inestabilidad del marco regulatorio en materia ambiental y la poca fiscalización por parte de las autoridades, lo cual conduce a incertidumbre jurídica y técnica. Esto puede influir en costos adicionales que deben incurrir las empresas para demostrar que los productos o servicios son limpios o generados amigablemente con el medio ambiente. Cada día, surgen nuevos dispositivos tecnológicos que nos facilitan el día a día y nos ofrecen un mayor número de servicios, pero seguro que no nos paramos a pensar lo que sucede con los artefactos tecnológicos que ya no usamos, que han quedado en desuso y se han convertido en chatarra. Desde lo más simple, pasando por lo cotidiano, hasta nuestro mundo digital, producen un gran impacto en el medio ambiente. Móviles, ordenadores, portátiles, grabadores, iPods… y así una larga lista, han facilitado nuestras funciones, pero una vez que los dejamos de utilizar se convierten en parte de la contaminación tecnológica. Cada uno de estos accesorios ha sido construido con plaquetas que contienen pequeñas cantidades de plomo, que arrojadas al suelo y no dándoles un tratamiento adecuado pueden llegar a causar contaminaciones de grandes consecuencias ecológicas. La solución de este problema no nos es muy lejana, pues no es demasiado complicada la separación adecuada de desechos; utilizando los come-baterías para arrojar viejas baterías que son enormemente contaminantes y separando todos los artefactos tecnológicos para luego poder llevarlos a un centro de reciclado especializado o incluso fábricas, donde se pueden volver a reutilizar esas placas sin tener que finalizar en un basurero a cielo abierto, siendo incinerados y dañando enormemente nuestra capa de ozono. Si hoy día sufrimos las sofocantes subidas de temperaturas por el cambio climático, causa pavor imaginar lo que sucederá cuando las aguas estén contaminadas, el cielo desprotegido y los rayos ultravioleta caigan directamente sobre nosotros.
Riesgos derivados de la contaminación tecnológica:
Los productos químicos utilizados en la industria tecnológica, como por ejemplo la electrónica, afectan la salud de los trabajadores expuestos a ellos en el proceso de fabricación y manipulación, tales como problemas respiratorios y la afectación de algunos órganos del cuerpo, su uso provoca la contaminación del entorno en el que interactúa la industria. Quizás algunos de los componentes más contaminantes en el mundo tecnológico actual sean las pilas y baterías, utilizadas en todos los aparatos electrónicos de consumo masivo. La diversidad y tecnología de las baterías han sido de tal magnitud que se han convertido en el componente más conocido y utilizado en cualquier aparato de consumo. Algunos retardan tés de fuego bromados son usados en tarjetas de circuito impreso y cubiertas de plástico, las cuales no se desintegran fácilmente y se acumulan en el ambiente. La exposición a largo plazo a estos compuestos puede afectar e interferir con algunas funciones hormonales del cuerpo. El mercurio que se utiliza en los monitores de pantalla plana como dispositivo de iluminación puede dañar funciones cerebrales sobre todo el desarrollo temprano. Compuestos de cromo hexavalente son utilizados en la producción de cubiertas de metal para los aparatos electrónicos y son altamente tóxicos y cancerígenos para los humanos. El PVC es un plástico que contiene cloro; se utiliza en algunos productos electrónicos para aislar cables y alambres. Estos químicos son altamente persistentes en el ambiente y son muy tóxicos incluso en muy bajas concentraciones. Otro de los riesgos más preocupantes, que más que riesgo ya se ha convertido en realidad es el cambio climático. Con respecto a este gran problema, grandes personalidades mundiales han tomado partido en el asunto, y sin duda, una de esas figuras ha sido el ex vicepresidente estadounidense Al Gore, que se basa en que el cambio climático es consecuencia de la actividad industrial que produce emisión de CO2 a la atmósfera. Con esto, su letanía actual es del tipo: "No hay algo más urgente en la actualidad que controlar las emisiones de CO2 a la atmósfera”, afirma en su documental “Una verdad incómoda” que presentó en sociedad en el año 2006 y que hoy circula por toda la red.
Aspecto técnico y aspecto legal
El término impacto ambiental se utiliza en dos campos diferenciados, aunque relacionados entre sí: el ámbito científico-técnico y el jurídico-administrativo. El primero ha dado lugar al desarrollo de metodologías para la identificación y la valoración de los impactos ambientales, incluidas en el proceso que se conoce como Evaluación de Impacto Ambiental (EIA); el segundo ha producido toda una serie de normas y leyes que obligan a la declaración de Impacto ambiental y ofrecen la oportunidad, no siempre aprovechada, de que un determinado proyecto pueda ser modificado o rechazado debido a sus consecuencias ambientales (véase Proyecto técnico). Este rechazo o modificación se produce a lo largo del procedimiento administrativo de la evaluación de impacto. Gracias a las evaluaciones de impacto, se estudian y predicen algunas de las consecuencias ambientales, esto es, los impactos que ocasiona una determinada acción, permitiendo evitarlas, atenuarlas o compensarlas.
Clasificación de los impactos
Los impactos ambientales pueden ser clasificados por su efecto en el tiempo, en 4 grupos principales :
Irreversible: Es aquel impacto cuya trascendencia en el medio, es de tal magnitud que es imposible revertirlo a su línea de base original. Ejemplo: Minerales a tajo abierto.
Temporal: Es aquel impacto cuya magnitud no genera mayores consecuencias y permite al medio recuperarse en el corto plazo hacia su línea de base original.
Reversible: El medio puede recuperarse a través del tiempo, ya sea a corto, mediano o largo plazo, no necesariamente restaurándose a la línea de base original.
Persistente: Las acciones o sucesos practicados al medio ambiente son de influencia a largo plazo, y extensibles a través del tiempo. Ejemplo: Derrame o emanaciones de ciertos químicos peligrosos sobre algún biotopo.
Algunas causas que hemos visto recientemente es lo que acaba de pasar en japon que fue algo impresionante y lo que deberíamos hacer es reaccionar con lo que esta pasando ahorita creemos que aun estamos a tiempo. A continuación se explicara sobre el tema:
El terremoto y tsunami de Japón de 2011, denominado oficialmente por la Agencia Meteorológica de Japón como el terremoto de la costa del Pacífico en la región de Tōhoku de 2011, fue un terremoto de magnitud 9,0 MW1 que creó olas de maremoto de hasta 10 m. El terremoto ocurrió a las 14:46:23 hora local (05:46:23 UTC) del viernes 11 de marzo de 2011. El epicentro del terremoto se ubicó en el mar, frente a la costa de Honshu, 130 km al este de Sendai, en la prefectura de Miyai, Japón. En un primer momento se calculó su magnitud en 7,9 grados MW, que fue posteriormente incrementada a 8,8, después a 8,9 grados por el Servicio Geológico de los Estados Unidos(USGS).6 Finalmente a 9,0 grados MW, confirmado por la Agencia Meteorológica de Japón y el Servicio Geológico de los Estados Unidos.7 El terremoto duró aproximadamente 2 minutos según expertos. El Servicio Geológico de Estados Unidos explicó que el terremoto ocurrió a causa de un desplazamiento en proximidades de la zona de la interface entre placas de subducción entre la placa del Pacífico y la placa Norteamericana. En la latitud en que ocurrió este terremoto, la placa del Pacífico se desplaza en dirección oeste con respecto a la placa Norteamericana a una velocidad de 83 mm/año. La placa del Pacífico se mete debajo de Japón en la fosa de Japón, y se hunde en dirección oeste debajo de Asia
Dos días antes, este terremoto había sido precedido por otro temblor importante, pero de menor magnitud, ocurrido el miércoles 9 de marzo de 2011, a las 02:45:18 UTC en la misma zona de la costa oriental de Honshū, Japón y que tuvo una intensidad de 7,2 MW a una profundidad de 14,1 kilómetros. También ese día las autoridades de la Agencia Meteorológica de Japón dieron una alerta de maremoto, pero sólo local, para la costa este de ese país.
La magnitud de 9,0  MW lo convirtió en el terremoto más potente sufrido en Japón hasta la fechaasí como el cuarto más potente del mundo de todos los terremotos medidos hasta la fecha. Desde 1973 la zona de subducción de la fosa de Japón ha experimentado nueve eventos sísmicos de magnitud 7 o superior. El mayor fue un terremoto ocurrido en diciembre de 1994 que tuvo una magnitud de 7,8, con epicentro a unos 260 km al norte del terremoto del 11 de marzo del 2011, el cual causó 3 muertos y unos 300 heridos.
Horas después del terremoto y su posterior tsunami, el volcán Karangetang en las Islas Célebes (Indonesia) entró en erupción a consecuencia del terremoto inicial. La NASA con ayuda de imágenes satelitales ha podido comprobar que el movimiento telúrico pudo haber movido la Isla Japonesa aproximadamente 2,4 metros, y alteró el eje terrestre en aproximadamente 10 centímetro

4.  Las actividades humanas que afectan al efecto invernadero

Desde hace algunas décadas, los científicos han alertado sobre los desequilibrios medioambientales que están provocando las actividades humanas, así como de las consecuencias previsibles de éstos.
En lo que respecta al efecto invernadero, se está produciendo un incremento espectacular del contenido en anhídrido carbónico en la atmósfera a causa de la quema indiscriminada de combustibles fósiles, como el carbón y la gasolina, y de la destrucción de los bosques tropicales. Así, desde el comienzo de la Revolución Industrial, el contenido en anhídrido carbónico de la atmósfera se ha incrementado aproximadamente en un 20 %. La consecuencia previsible de esto es el aumento de la temperatura media de la superficie de la Tierra, con un cambio global del clima que afectará tanto a las plantas verdes como a los animales. Las previsiones más catastrofistas aseguran que incluso se producirá una fusión parcial del hielo que cubre permanentemente los Polos, con lo que muchas zonas costeras podrían quedar sumergidas bajo las aguas. Sin embargo, el efecto invernadero es un fenómeno muy complejo, en el que intervienen un gran número de factores, y resulta difícil evaluar tanto el previsible aumento en la temperatura media de la Tierra, como los efectos de éste sobre el clima.
Aún cuando no es posible cuantificar las consecuencias de éste fenómeno, la actitud más sensata es la prevención. El obtener un mayor rendimiento de la energía, así como el utilizar energías renovables, produciría una disminución del consumo de combustibles fósiles y, por lo tanto, de nuestro aporte de anhídrido carbónico a la atmósfera. Esta prevención también incluiría la reforestación, con el fin de aumentar los medios naturales de eliminación de anhídrido carbónico. En cualquier caso, lo importante es ser conscientes de cómo, en muchas ocasiones, nuestras acciones individuales tienen influencia tanto sobre la atmósfera como sobre la habitabilidad del planeta.
La atmósfera, por el hecho de ser muy transparente para la luz visible pero mucho menos para la radiación infrarroja, produce para la superficie terrestre el mismo efecto que el techo de cristal produce en un invernadero; la luz solar, que llega sin grandes obstáculos hasta el suelo, lo calienta, dando lugar a que emita rayos infrarrojos (ondas caloríficas), los cuales, a diferencia de los rayos de luz, son absorbidos en gran parte por el vidrio o la atmósfera. Al final la cantidad de energía emitida al espacio tiene que ser la misma que la absorbida, pero la superficie terrestre tiene que alcanzar la temperatura en que ambos flujos se equilibran, la cual es más alta en presencia de una atmósfera (en un planeta) o de techos de cristal (en un invernadero; aunque en realidad el cristal de un invernadero protege de la pérdida de calor más porque interrumpe la circulación del aire, que porque sea opaco a los rayos infrarrojos).
Los más importantes están presentes en la atmósfera de manera natural, aunque su concentración puede verse modificada por la actividad humana, pero también entran en este concepto algunos gases artificiales, producto de la industria. Esos gases contribuyen más o menos de forma neta al efecto invernadero por la estructura de sus moléculas  y, de forma sustancial, por la cantidad de moléculas del gas presentes en la atmósfera.
El efecto invernadero afecta a todos los cuerpos planetarios del sistema solar  dotados de atmósfera, porque aunque no todos los gases absorben radiación infrarroja, en ninguna de esas atmósferas faltan los que sí lo hacen. En la Tierra el efecto invernadero es responsable de un exceso de 33 °C de la temperatura superficial (15 °C de valor medio) sobre la temperatura de emisión (–18 °C).
El efecto invernadero es un fenómeno natural, pero la alusión frecuente a él en relación con el calentamiento global hace creer a algunos que es en sí indeseable, y una consecuencia reciente de la contaminación atmosférica.
 
MECANISMO


Los gases de invernadero absorben los fotones infrarrojos emitidos por el suelo calentado por el sol. La energía de esos fotones no basta para causar reacciones químicas, simplemente aumenta la energía de rotación y de vibración de las moléculas implicadas.

Consecuencias:
Conocemos las consecuencias que podemos esperar del efecto invernadero para el próximo siglo, en caso de que no vuelva a valores más bajos:

Aumento de la temperatura media del planeta.

Aumento de sequías en unas zonas e inundaciones en otras.

Mayor frecuencia de formación de huracanes.

Progresivo deshielo de los casquetes polares, con la consiguiente subida de los niveles de los océanos.

Incremento de las precipitaciones a nivel planetario pero lloverá menos días y más torrencialmente.

Aumento de la cantidad de días calurosos, traducido en olas de calor.

¿Por qué crees que la ocupación del territorio, ya sea para la agricultura y la ganadería o la construcción de zonas urbanas e industriales hace aumentar la concentración de gases de efecto invernadero en el aire?
Nosotras creemos que lo hacen porque es un bien el mundo porque por ejemplo la agricultura  beneficia porque en la cultivación del arroz cuando están inundados se e mite a la atmosfera metano esto favorece en el aumento de la temperatura media en el planeta también en la ganadería la digestión del ganado rumiante y la descomposición de sus excrementos genera la emisión de metano y dióxido de carbono favorece en el aumento de la temperatura también las zonas industriales ayudan como las centrales térmicas generan electricidad gracias a a la combustión de combustibles fósiles, este proceso emite CO2 a la atmosfera pero especialmente favorece al efecto invernadero.


5. ¿Crees que en nuestro planeta existen actividades naturales que emiten gases de efecto invernadero?





La Comunidad Científica ya ha alcanzado un consenso en cuanto al cambio climático.
Existe un gran número de factores naturales responsables del cambio climático. Los más importantes incluyen los movimientos de las Placas, los eventos volcánicos, las corrientes oceánicas, los cometas, el Sol... La Tierra forma parte de todo lo que se encuentra sobre ella y todo lo que la compone, forma parte de ella. Cualquier anomalía en un punto del planeta, tiene sus efectos a nivel global. Se pueden sentir de forma inmediata o puede que tarden más tiempo en surtir efecto, pero al final, todos influyen de un modo u otro en el clima.
Movimiento de los continentes.
         Puede parecer ajeno al clima, pero el movimiento de los continentes también influye en el clima del planeta en el que vivimos. Cuando cambia el aspecto de la tierra, su posición, su forma... El viento, la lluvia, las corrientes oceánicas cambian.
Actividad volcánica.
Una erupción volcánica emite millones de toneladas de dióxido de sulfuro, vapor de agua y ceniza a la atmósfera. Todos estos materiales volcánicos no desaparecen por arte de magia, sino que pueden cambiar los patrones climáticos durante años.
Los gases y ceniza volcánica pueden bloquear parcialmente los rayos del sol reduciendo la temperatura en los niveles más bajos de la atmósfera y cambiando los patrones de circulación atmosférica. Vuelos
Las corrientes oceános
Los océanos componen una gran parte del sistema climático. Cubren casi un 71% de la Tierra y absorben alrededor del doble de la radiación del sol. Las corrientes oceánicas mueven grandes cantidades de calor por el planeta a través de canales. Algunas zonas del mundo se encuentran más influenciadas por las corrientes oceánicas que otras.
Actividad solar.
Debido a que el sol es la mayor fuente de energía de la tierra, cualquier variación en la frecuencia solar influye en nuestro clima. Los científicos han observado que el número de manchas solares sobre la superficie del sol, determinan las erupciones solares y cuantas más manchas solares, mayor es la energía solar que emiten. Aunque aún no se ha establecido una relación directa entre los cambios en la actividad solar y el cambio en nuestro clima, existen muchos datos que parecen corroborar esta teoría.


 


La concentración de gases invernadero es pequeña en la atmosfera.
El cambio climático ocurre por una exacerbada acción del efecto invernadero, resultado del incremento de las concentraciones de las gases de efecto invernadero, es decir, de la cantidad y variedad de algunos de los gases que la componen.
De manera natural, la atmósfera está compuesta en un 78.1% de nitrógeno, un 20.9% de oxígeno, y el restante 1% por otros gases, entre los que se encuentran el argón, el helio, y algunos gases de efecto invernadero, como el bióxido de carbono (0.035%), el metano (0.00015%), el óxido nitroso (0.0000016%) y el vapor de agua (0.7%).
Derivado de la actividad humana, una gran cantidad de gases han sido emitidos a la atmósfera, lo que ha cambiado ligeramente la composición de la misma. Como ejemplo se puede mencionar que la concentración de varios de los gases de efecto invernadero ha aumentado.
En los últimos trescientos años la cantidad de bióxido de carbono aumentó de 280 a 368 miligramos por metro cúbico (mg/m3 o partes por millón); la de metano, de 0.7 a 1.75 mg/m3 ; y la de óxido nitroso, de 0.27 a 0.316 mg/m3. Esto significa que, en volumen, ahora el bióxido de carbono es el 0.046% de la atmósfera en lugar del 0.035%; el metano ahora es el 0.00037% en lugar del 0.00015%, y el óxido nitroso es el 0.00000187% en vez del 0.0000016%.
Aunque estas concentraciones son muy pequeñas comparadas con las del oxígeno o el nitrógeno, el cambio en ellas realmente esta afectado al planeta.
El efecto invernadero
El efecto invernadero es un fenómeno atmosférico natural que permite mantener la temperatura del planeta al retener parte de la energía proveniente del Sol*.
La Tierra recibe de forma permanente un flujo de rayos solares; una parte de los rayos del Sol son reflejados al espacio por las nubes, pero la mayor parte de estas ondas luminosas atraviesan la atmósfera y alcanzan la superficie terrestre. La energía recibida del Sol calienta la superficie de la Tierra y los océanos.
A su vez, la superficie de la Tierra emite su energía de vuelta hacia la atmósfera y hacia el espacio exterior en forma de ondas térmicas conocidas como radiación de onda larga (radiación infrarroja).
Sin embargo, no toda la energía liberada por la Tierra es devuelta al espacio; parte de ella queda atrapada en la atmósfera debido a la existencia de ciertos gases, denominados gases de efecto invernadero, que tienen la propiedad de absorber y re-emitir la radiación proveniente de la superficie de la Tierra.
Los gases de efecto invernadero atrapan el calor emitido por la Tierra y lo mantienen dentro de la atmósfera, actuando a modo de un "gigantesco invernadero". A este fenómeno se le conoce como Efecto Invernadero**.



La actividad humana ha alterado el volumen y la proporción de los gases de efecto invernadero en la atmósfera. En particular, el volumen de estos gases ha ido aumentando cada vez de manera más acelerada y, por lo mismo, el efecto también.
Debido a la relación entre los gases de efecto invernadero y el cambio climático, es importante identificar los sectores emisores de dichos gases y las cantidades que liberan. Lo anterior, permite conocer los sectores con mayor responsabilidad en la emisión de gases de efecto invernadero, y sirve de base para el diseño de políticas y acciones de captura o reducción de emisiones.
Estudios desarrollados por investigadores alrededor del mundo permiten identificar las fuentes de origen humano de los gases de efecto invernadero.
Nosotras pensamos que si no existiera humanos en el planeta si existiera actividades naturales que emiten gases de efecto invernadero como son porque el mundo depende de muchos como son la atmosfera, la hidrosfera, la criosfera y la biosfera estos hacen posible un planeta natural .




INTEGRANTES:
LOPEZ PINEDA DALIA NAYELI
ROCHA GOMEZ SONIA JANETH
FRANCO VILLAMIN GEMMA
CHAVEZ ROJAS ELVIA
MARTINEZ BAZAN DENISSE
Bibliografía:



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